“El desafío de fabricar maquinaria agrícola autopropulsada en Argentina”

Argentina puede aumentar la producción de alimentos con una mayor apuesta a la renovación tecnológica

AFAT, la asociación que nuclea a diversas empresas vinculadas a la fabricación y comercialización de cosechadoras, tractores, pulverizadoras, maquinaria y motores en Argentina, aseguró este miércoles que nuestro país está ante la oportunidad de aumentar la producción agroalimentaria si apuesta por una mayor inversión en la renovación tecnológica de la maquinaria agrícola autopropulsada.

En el marco de una conferencia de prensa que se llevó a cabo en La Rural con motivo del Día de la Maquinaria Agrícola, titulada “El desafío de fabricar maquinaria agrícola autopropulsada en Argentina”, directivos de las empresas asociadas a AFAT coincidieron en la necesidad de alentar a la modernización del parque, que según datos del Censo Nacional Agropecuario, envejeció de manera significativa dado que el 73% de los tractores  y el 46% de las cosechadoras locales son equipos con más de 15 años de vida.

La presentación estuvo a cargo de Leandro Brito Peret, director ejecutivo de AFAT, quien destacó que la asociación, que se fundó en 1973, cuenta con siete empresas radicadas en Argentina en las tres provincias de la zona núcleo (Córdoba, Santa Fe y provincia de Buenos Aires). “En conjunto, representamos el 77% del patentamiento de tractores, el 94% de las cosechadoras, el 100% de las forrajeras autopropulsadas y casi el 43% de las pulverizadoras autopropulsadas. Para alcanzar esta presencia y penetración en el mercado, entre todos los socios sumamos 10 plantas industriales que superan, en total, los 575 mil metros cuadrados en superficie fabril. La capacidad instalada suma 11.500 tractores, 4.000 cosechadoras, casi 500 pulverizadoras, 77.000 motores y casi 1.000 implementos. Para esto, generamos empleo para más de 9.000 familias, contando solamente el trabajo en planta y una red comercial que abarca 650 puntos de venta en todo el país. A esta estructura hay que agregarle las casi 2.000 empresas proveedoras de bienes y servicios en Argentina. Todo este esfuerzo se ve reflejado en números: en el año 2020, la facturación agregada de las empresas alcanzó los casi $94 mil millones, y arriba de los US$ 227 millones en exportaciones”, detalló.

Según datos de la asociación, actualmente existen más de 1.200 empresas que fabrican o ensamblan maquinaria agrícola y agropartes en Argentina, y en la cumbre de esa pirámide se encuentran las fabricantes de maquinaria autopropulsada, es decir, aquella que se mueve por sus propios medios. Se trata de tractores, cosechadoras de granos, pulverizadoras, cosechadoras de forrajes y algunas otras máquinas especiales, cuyo proceso de producción es complejo porque requiere aplicación de recursos humanos, económicos y tecnológicos, demanda experiencia acumulada durante décadas y la construcción de un prestigio de marca.

Para AFAT, este sector es fundamental para la economía nacional, ya que posee plantas industriales que funcionan como polos económicos a su alrededor, genera un alto volumen de puestos de trabajo con colaboradores que se capacitan continuamente y sostiene fuertes redes de comercialización distribuidas a lo largo y a lo ancho del país que dan trabajo a miles de familias tanto en ciudades grandes como en localidades pequeñas.

“La mayoría de nosotras somos empresas sólidamente fijadas a este suelo y llevamos décadas produciendo maquinaria autopropulsada en el país con una vocación unívoca de industria argentina. En ese tiempo hemos conformado una amplia red de proveedores aportando al desarrollo y crecimiento de muchos de ellos. Aplicamos a los tractores, cosechadoras de granos y forrajes y pulverizadoras que producen altos niveles tecnológicos generados en el país o transferidos de sus centros de desarrollo en otros países”, señaló Ignacio Armendáriz, gerente comercial de Agrale Argentina.

Armendáriz resaltó que las empresas cuentan con una capacidad industrial que duplica a la ocupada actualmente, lo cual es un recurso que la economía argentina debería aprovechar a través del impulso del crecimiento de los mercados.

En este sentido, aseguró que la existencia de una ley de Plan Canje o de renovación de maquinaria agrícola generaría diversos beneficios, como por ejemplo la aceleración de la incorporación de tecnología a la producción agropecuaria, la incorporación al circuito de pequeños productores incapaces de producir actualmente por la obsolescencia de su parque, la remecanización de provincias cuyo parque de maquinaria es totalmente obsoleto, la eliminación de costos de reparaciones de maquinarias con varias décadas de uso, el avance en la sustentabilidad con equipos con prestaciones más amigables con el ambiente y el mejor aprovechamiento de la oportunidad de labor por medio de la utilización de maquinaria de última generación más confiable.

“No hace falta ser un especialista para afirmar que los tractores, cosechadoras de cereales y forrajes y pulverizadoras de hace 15 años o más son unas máquinas completamente distintas a las que se comercializan actualmente: sistemas de cambios bajo carga, transmisiones automáticas, control satelital, pilotos automáticos o control de pérdidas son solo algunas de las mejoras técnicas que ofrecen las máquinas actuales y a las cuales se facilitaría el acceso por medio de un plan de renovación”, remarcó Armendáriz.

El directivo de Agrale hizo hincapié en el proyecto que inició AFAT en 2020 para avanzar en esa línea, que presentó al Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación y que vienen enriqueciendo con el aporte de ACARA.

“Los fondos asignados al plan renovación deberían incluirse anualmente en el Presupuesto Nacional como una partida al efecto asignada al Ministerio de Agricultura, y el beneficio debería ser otorgado directamente al productor agropecuario o contratista propietario de la máquina obsoleta y comprador de una unidad nueva similar. Es condición para recibir el beneficio que la máquina obsoleta sea previamente destruida”, detalló.

En ese marco, Armendáriz aseguró que el financiamiento es otro de los puntos fundamentales para el acceso del productor y de los contratistas a la renovación de tractores, cosechadoras de cereales y forrajes y pulverizadoras.

“En una economía sostenida fuertemente por la producción agropecuaria, el apoyo estatal al sector vía financiamiento debería ser política de Estado, ya que es a través de ella que el país obtiene parte importante de las divisas que necesita”, sostuvo.

Y agregó: “Deben existir líneas de crédito permanentes en el tiempo, a tasas preferenciales si es posible, previsibles en cuanto a la no modificación de su estructura y transparentes en la asignación y el destino de los fondos”.

Calidad e integración local: el desafío de los proveedores

En comparación con la industria automotriz, la industria de la maquinaria agrícola autopropulsada demanda piezas de alta complejidad e inversión y de muy bajo volumen (ej.8.000 tractores año vs. 800.000 automóviles). Ante este panorama, el objetivo es desarrollar proveedores de calidad de clase mundial en Argentina que además de suministrarnos piezas localmente puedan sumar volumen a su ecuación de inversión a partir de la exportación a otras fábricas hermanas de las empresas de AFAT en el resto del mundo.

Sergio Fernández, presidente de industrias John Deere Argentina, explicó:

“Como todo fabricante, por comunicación, entrega, inventarios, desarrollo de productos, logística, entre otros factores, siempre preferimos una base de proveedores local a una importada, pero obviamente tenemos que tener en cuenta la realidad de la disponibilidad tecnológica. Está en nuestro ADN fomentarla y para eso en AFAT trabajamos con el INTI, por ejemplo para desarrollar ensayos que todavía no se pueden hacer en Argentina, y también en otro aspecto importante de la política industrial que es la articulación con actores del ámbito gubernamental, académico y científico/tecnológico, aportando nuestro expertise y know-how en sistemas de manufactura, procesos de calidad y experiencia global en el desarrollo de proveedores”, relató Fernández.

“Una agroindustria de primer nivel como la argentina requiere de una base de maquinaria agrícola autopropulsada nacional también de primer nivel. Quienes formamos AFAT estamos para conseguirla”, expresó Fernández durante la conferencia.

El contexto actual

Tomás Liceda Rosasco, de CNH Industrial, se refirió al contexto productivo actual y a la transferencia de tecnología en pos de la productividad. “Estamos yendo a una campaña récord histórica en Argentina, y el avance en tecnología, principalmente en cosechadoras, nos va a permitir reducir pérdidas”, señaló.

“A pesar del contexto mundial de las últimas dos campañas, el sector productivo argentino sigue avanzando. Si se miran los números, se están alcanzando las 34 millones de hectáreas con una producción total de 130 millones de toneladas. Esa es una muy buena noticia para todos los que nos vinculamos con el sector”, expresó.

El directivo sostuvo que la demanda de robots y las soluciones de la agricultura de precisión tendrán un impacto en el total de la producción, y afirmó que es hora de prestar atención en ese sentido. “Con solo renovar o actualizar el parque de maquinaria actual en Argentina podríamos dar un fuerte salto en productividad”, consideró.

Costos, un punto clave

A su turno, Carlos Palmieri, gerente general de Jacto, señaló la importancia de poner el ojo en los costos e impuestos a la hora de producir.

“Por un lado, afecta a la caja el recupero del IVA diferencial entre el 21% de costo de materiales al 10,5% que recuperamos en la venta, que es lento y con alta desvalorización y costo financiero incierto”, explicó.

En tanto, señaló que el IIBB e Impuestos Municipales son elevados y, al no estar extremadamente claros en su forma de generación y/o cálculo, también impactan en costos por la gestión administrativa.

Además, indicó que existen otros impuestos que impactan en la comercialización, como Sellos, que mantienen costos muy elevados y que afectan en gestiones complejas y demoradas.

“También podemos mencionar, en relación a los empleados, a la cantidad de sindicatos que existen en nuestro país, más de 3.000, y a partir de ello, más de 3.000 negociaciones diferentes, leyes, exigencias y alternativas. A eso se suman las exigencias de seguros, que si bien tienen en su mayoría costos bajos, existen tres o cuatro diferentes para atender cada contratación, lo que implica cálculos interminables de impuestos varios como Ganancias, obras sociales, incrementos no remunerativos, luego remunerativos, entre otros”, detalló.

Impacto ambiental: es posible producir más de manera sustentable

En otro momento de la conferencia, Hermes Machado Da Silva, presidente de Stara Argentina, se refirió a la importancia de crecer en la apuesta por la sustentabilidad para producir más con menor impacto ambiental.

“Nuestro desafío es aumentar la producción de alimentos ante el constante aumento de la población a nivel mundial. Para el 2030 seremos 8.5 billones de habitantes en el mundo, y debemos atender la demanda que ese crecimiento requerirá cuidando los recursos”, expresó.

Dentro de esta línea de trabajo, AFAT presentó al gobierno una propuesta para la reducción de emisiones de la maquinaria agrícola equipada con motores de potencia entre 19Kw y 560Kw, consistente en implementar en el país, en forma gradual, una normativa equivalente a la Tier 3 de EE.UU., Stage IIIA de la Unión Europea o MAR-1 de Brasil.

Diversidad, inclusión y rol de la mujer

A su turno, Gisele Tort, gerente de Servicio Técnico a Campo de AGCO Argentina aseguró que en AFAT existe el compromiso de mejorar continuamente los procesos y programas para asegurar un entorno seguro, inclusivo y estimulante para la fuerza de trabajo y los futuros líderes del sector.

“Reconocemos la importancia de la diversidad y la inclusión en nuestro entorno de trabajo y en las comunidades. Nuestros líderes saben, debido a la experiencia, que la diversidad en el pensamiento promueve la creatividad y la innovación y que al fomentar un entorno inclusivo se aprovecha dicha creatividad para un mayor éxito en los negocios. La creciente participación de las mujeres en la agroindustria, incluso en puestos destacados, también merece atención”, expresó.

Conclusiones

Finalmente, el presidente de AFAT, Reynaldo Postacchini, señaló que es fundamental un trabajo en conjunto entre el sector privado y el público para potenciar el desarrollo de la maquinaria autopropulsada en Argentina, con el objetivo de dar un salto de productividad.

“Desde AFAT buscamos traer la mejor tecnología para la mejor producción, con el menor impacto ambiental posible. Estamos haciendo el esfuerzo para ser competitivos y ayudar al sector a seguir creciendo”, expresó.

Asimismo, resaltó que la integración a nivel género es muy importante y hay, en ese sentido, un gran camino por desarrollar, al igual que lo referente a la capacitación y al avance en la conectividad.

“Tenemos que incentivar la educación rural para que el día de mañana los jóvenes sepan manejar la tecnología”, cerró.


12 de diciembre, día de la Maquinaria Agrícola

El 12 de diciembre de 1951 la fabricación de maquinaria y repuestos agrícolas, fue incorporadas al régimen de industrias de “interés nacional” según el decreto N°25.056. A 70 años de aquel hito, todo ha cambiado.

El avance en la tecnología de las máquinas han modificado a la agricultura, transformándola en una industria de eficiencia y producción masiva. Ese salto ha hecho que nuestro país tenga en potencia, la capacidad de producir alimentos para 400 millones de personas.

En Argentina tenemos innovación y tecnología al nivel de los principales países del mundo. La inversión en cualquier tipo de maquinaria agrícola es recompensada con una mejora en los resultados, mayor velocidad en todos los procesos, mayor precisión en la siembra, mejores rendimientos en la cosecha, ahorro de insumos y de tiempo. Los beneficios económicos son visibles desde el primer momento.

El 12 de diciembre de 2021 festejamos que la Argentina encuentra su industria de la Maquinaria Agrícola al nivel de las mejores del mundo.

6 de diciembre, día nacional del Gaucho

A principios del siglo XX el gaucho empezó a ser visto como un arquetipo de la nacionalidad argentina, y la figura que mejor representa a nuestro país. Por eso, se decidió ligar el nacimiento del autor del Martín Fierro, el 10 de noviembre, con la celebración de la tradición argentina, y la fecha de la primera edición de su obra, el 6 de diciembre de 1879, con el reconocimiento a la figura del gaucho.

El mercado se va normalizando luego de un 2020 marcado por la pandemia

Según señala el último informe de la industria de maquinaria agrícola elaborado por el INDEC, en el tercer trimestre de 2021, el total de unidades vendidas de todos los segmentos de maquinaria registran subas interanuales. Las cosechadoras exhiben el mayor incremento respecto a igual trimestre del año anterior, con 57,2%; los tractores, 35,1%; las sembradoras, 13,2%; y las pulverizadoras autopropulsadas, 5,0%.

Por su parte, cuando se analizan las unidades vendidas en el acumulado al tercer trimestre, los tractores registraron el mayor incremento interanual con 14,4%; las sembradoras crecieron 7,1%; y las pulverizadoras autopropulsadas un 12,6%; mientras que las unidades vendidas de cosechadoras experimentaron una disminución de 1,1%.

“Desde AFAT vemos que en lo que va del año el mercado se mostró más demandante que en 2020, que fue un periodo marcado por la pandemia y todas las complicaciones generadas por esa situación desafiante. Es por eso que no queremos dejar de resaltar que la base de comparación es baja, y en consecuencia, el crecimiento interanual de ventas arroja esos valores porcentuales”, aseguró Reynaldo Postacchini, presidente de la Asociación.

““Respecto de este 2021, el mercado se va normalizando. Por la situación de divisas y coyuntura por todos conocida, la demanda fue cubierta parcialmente y algunas gamas de producto estuvieron más afectadas. Confiamos en que sea mejorada esta situación en el próximo año porque, según lo visto en el Censo Nacional Agropecuario, estamos ante una gran oportunidad para aumentar la producción agropecuaria del país a través de la renovación tecnológica de la maquinaria agrícola autopropulsada; por ello continuaremos alentando la modernización del parque”.

El enojo de un empresario agropecuario argentino y un pedido desesperado al Gobierno

Reynaldo Postacchini, presidente de la Asociación de Fábricas y Distribuidores Argentinos de Tractores y otros equipamientos Agrícolas, Viales, Mineros, Industriales y Motores (AFAT), la entidad que agrupa a firmas multinacionales de maquinaria agrícola que operan en el país, alertó sobre los problemas que afronta el sector por las trabas a las importaciones y dejó una dura advertencia.

El dirigente se quejó por la falta de insumos y suministros que impiden a ese sector de la industria funcionar con normalidad y abastecer a la demanda del mercado local.

«Antes de prometer la entrega de un producto y no cumplirlo, preferimos no tomar pedidos anticipados. Eso genera una demanda insatisfecha: el mercado está en comprador y nosotros no podemos hacer frente a eso de la manera esperada», dijo en diálogo con La Nación.

En esa línea, el empresario agregó: «Son momentos claves para el campo y no hay certezas. Hay una falta de un camino claro en cuestiones relacionadas a la productividad».

LOS PEDIDOS AL GOBIERNO

Postacchini sostuvo que, desde el sector, intentan advertir continuamente al Gobierno sobre la gravedad de la situación en la que se encuentra la actividad: «El mundo se sigue moviendo y los países competidores siguen trabajando y sacándonos ventajas. Con el compre nacional no vamos a salir adelante. Con el cierre al mundo a la Argentina no le fue bien, se retrasó y perdimos industrias y fábricas».

«A veces se dicen cosas para la tribuna, hablando de multinacionales como algo malo, sin contar que son empresas muy loables que dan trabajo genuino, que pagan sus impuestos e invierten el capital en el país», añadió. Y continuó: «Tenemos que dar gracias a Dios que tenemos firmas de afuera que todavía traen inversiones a la Argentina».

El director de AFAT pidió, además, «discutir honestamente la realidad del sector». «Hay cosas que no se pueden fabricar por un tema de escala», confesó.

LOS PROBLEMAS CON EL DÓLAR

Otro de los problemas que afronta el sector es el de la brecha cambiaria. «Cuando exportamos maquinaria a un precio en dólares determinado no es un número real porque el Estado te entrega un valor oficial. Exporto dólares que no son reales sumado a lo retrasado que está con respecto a la inflación. Los costos suben en dólares todos los días y no podemos ser competitivos», detalló Postacchini.

Si bien reconoció que la pandemia dejó secuelas en todo el mundo en lo referido a la provisión de insumos y la logística, y no es un problema exclusivo de Argentina, el empresario sostuvo que la falta de dólares para importar se convirtió en una situación difícil de sobrellevar para las fábricas del sector y conlleva a su ralentización.

En este contexto, el presidente de AFAT apuntó: «El Gobierno tiene un gran problema con la entrada de divisas. Pero su principal problema es que gasta más de lo que recauda. La estrategia para crecer sería equilibrio fiscal. Los países de la región tienen una inflación que no supera los dos dígitos. Esto demuestra que desde hace 70 años estamos haciendo mal las cosas«.

Y agregó: «Lamentablemente, si no administramos de manera eficiente, la cosa no va a cambiar: el gasto del Estado es enorme. Hay dos ejes a seguir: la educación y una mejor administración pública de sus recursos escasos».

Finalmente, el dirigente empresarial pidió plantear seriamente el modelo de país que se quiere. «A veces preocupa que un día los dueños de las empresas decidan cerrar e irse del país por falta de previsibilidad. Ojalá que nunca pase algo así y que la Argentina no se convierta en Venezuela», concluyó.

Cronista Comercial

https://www.cronista.com/economia-politica/el-enojo-de-un-empresario-agropecuario-argentino-y-un-pedido-desesperado-al-gobierno/

“Los países competidores siguen trabajando y sacándonos ventajas”, la advertencia de un empresario

Las trabas a las importaciones están poniendo en apuros a diversos rubros del sector agropecuario. Por la falta de insumos, por ejemplo, la industria de la maquinaria agrícola de empresas multinacionales que operan en el país está produciendo menos, no logran abastecer la demanda, prefieren no “comprometerse” en la entrega y no toman pedidos anticipados.

“Antes de prometer la entrega de un producto y no cumplirlo, preferimos no tomar pedidos anticipados. Eso genera una demanda insatisfecha: el mercado está en comprador y nosotros no podemos hacer frente a eso de la manera esperada”, dijo en diálogo con LA NACION Reynaldo Postacchini, presidente de la Asociación de Fábricas y Distribuidores Argentinos de Tractores y otros equipamientos Agrícolas, Viales, Mineros, Industriales y Motores (AFAT).

Señaló que recién cuando está “listo” el producto se encargan de ponerlo en venta. “Son momentos claves para el campo y no hay certezas. Hay una falta de un camino claro en cuestiones relacionadas a la productividad”, dijo.

En este sentido, contó que desde el sector continuamente tratan de explicarle al Gobierno sobre la situación que atraviesa la actividad. “El mundo se sigue moviendo y los países competidores siguen trabajando y sacándonos ventajas. Con el compre nacional no vamos a salir adelante. Con el cierre al mundo a la Argentina no le fue bien, se retrasó y perdimos industrias y fábricas”, dijo.

“A veces se dicen cosas para la tribuna, hablando de multinacionales como algo malo, sin contar que son empresas muy loables que dan trabajo genuino, que pagan sus impuestos e invierten el capital en el país. Tenemos que dar gracias a Dios que tenemos firmas de afuera que todavía traen inversiones a la Argentina”, añadió.

Explicó que el mercado se globalizó y fabricar es algo que guarda relación con la necesidad de producir escala para poder ser competitivos. “Discutamos honestamente la realidad del sector. Hay cosas que no se pueden fabricar por un tema de escala”, apuntó.

Detalló que la brecha cambiaria ha puesto cuesta arriba a las firmas instaladas en el país“Cuando exportamos maquinaria a un precio en dólares determinado no es un número real porque el Estado te entrega un valor oficial. Exporto dólares que no son reales sumado a lo retrasado que está con respecto a la inflación. Los costos suben en dólares todos los días y no podemos ser competitivos”. AFAT tiene asociadas a siete de las principales firmas de maquinaria agrícola que concentran al menos el 70% del mercado de tractores y más 90% de las cosechadoras.

Si bien recordó que se está saliendo de un escenario de pandemia, donde a nivel global hubo problemas con la provisión de insumos y la logística (pocos viajes y retrasos en los envíos, además de costos que se triplicaron), la falta de dólares para importar se ha convertido en una situación difícil de sobrellevar para las fábricas del sector y que conlleva a su ralentización.

“El Gobierno tiene un gran problema con la entrada de divisas. Pero su principal problema es que gasta más de lo que recauda. La estrategia para crecer sería equilibrio fiscal. Los países de la región tienen una inflación que no supera los dos dígitos. Esto demuestra que desde hace 70 años estamos haciendo mal las cosas”, puntualizó.

“Lamentablemente, si no administramos de manera eficiente, la cosa no va a cambiar: el gasto del Estado es enorme. Hay dos ejes a seguir: la educación y una mejor administración pública de sus recursos escasos”, agregó.

Para Postacchini, lo que falta son políticas públicas claras a largo plazo. “Debemos plantearnos qué modelo de país queremos. A veces preocupa que un día los dueños de las empresas decidan cerrar e irse del país por falta de previsibilidad. Ojalá que nunca pase algo así y que la Argentina no se convierta en Venezuela”, finalizó.

La Nación. Mariana Reinke

https://www.lanacion.com.ar/economia/campo/tecnologias/el-enojo-de-un-empresario-de-la-maquinaria-agricola-que-la-argentina-no-se-convierta-en-venezuela-nid02112021

Claas registra un mayor uso de los mapas forrajeros

Claas está registrando una utilización creciente en Argentina de los mapas de rendimiento que posibilitar confeccionar las picadoras Jaguar.

Son herramientas de Agricultura de Precisión que permiten generar información sobre la productividad de los lotes y transmitirla en tiempo real.

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“En Argentina se pican 2 millones de hectáreas de forraje y un millón y medio es de maíz. Y el monitor de rendimiento es un recurso que debemos utilizar y aprovechar”, define Federico Sánchez, de Marketing Táctico de Claas.

En el mercado argentino, Claas tiene desde el año 2010 la serie 494 de picadoras equipadas con monitor de rendimiento.

“Actualmente, un 30% de la superficie que se trabaja con nuestras máquinas se mapea y hay una oportunidad general para sacarle más provecho”, remarca Sánchez.

Crecimiento

En el mercado argentino, Claas cuenta con un servicio de asesoramiento remoto para soluciones de Agricultura de Precisión al instante.

“En ese servicio, antes las consultas referidas a las picadoras no superaban el 15% del universo de llamada”, precisa Sánchez.

“Pero ahora hay un crecimiento y ya cubren un 25% de las llamadas. Son clientes que necesitan sí o sí el mapa de rendimiento, porque además de dar el servicio de picado y confección de silos, les solicitan los datos del trabajo realizado”, agrega.

“Surge un camino que debemos seguir porque los monitores y la posibilidad de hacer los mapas de rendimiento, están en las picadoras”, subraya Sánchez.

Potencial

En líneas generales, los equipos forrajeros ofrecen posibilidades tecnológicas que contribuyen a mejorar el trabajo de los contratistas.

Por ejemplo, la picadora cuenta con un sensor volumétrico que mide en toneladas, por hora, el material que procesa la máquina

“Pero sí o sí hay que calibrar la picadora a nivel de lote y no por día o cada cada tanto”, advierte Sánchez.

“Por otra parte, el parque de carros forrajeros con balanza es chico todavía y por eso no se generan mapas de tanta calidad”, comenta el Responsable de Marketing Táctico.

“Pero una oportunidad que estamos viendo, es que la mayoría de los establecimientos de carne o leche, tiene mixers y entonces podemos hacer una tirada y sacar el dato y hacer un mapa con precisión”, explica.

Al instante

Otra tecnología para aprovechar es la telemetría que permite transmitir datos en tiempo real y ajustar el uso de las picadoras y las embolsadoras de forraje.

“Hoy hay picadoras que trabajan con dos embolsadoras al mismo tiempo para optimizar los tiempos en campaña y picar más hectáreas”, apunta Sánchez.

La posibilidad de captar información y aplicarla, termina incidiendo en los números finales del trabajo.

“La picadora permite leer la humedad de la materia seca en el momento y en base a eso se puede regular la altura de corte para llegar al 37% o 38% de materia seca. Son mucho más que datos”, remarca Sánchez.

“Es información para tomar decisiones en tiempo real. A nivel de rentabilidad permite bajar el costo operativo de la máquina y cuidar la calidad del proceso”, añade.

Fuente: Maquinac

Gabriel Tronchoni: “New Holland continúa apostando a la innovación”

CNH Industrial se apoya en su complejo fabril de Córdoba con el objetivo de fortalecer la oferta de máquinas agrícolas en Argentina.

Tiene en marcha una serie de proyectos que involucran, especialmente, a tractores y cosechadoras de la marca New Holland. También existe un programa de fortalecimiento de su red comercial.

Gabriel Tronchoni, Gerente de Marketing de New Holland, analiza en diálogo con Maquinac cómo se encuentra hoy el mercado argentino, las tendencias a las que se apunta y qué importancia tiene la estrategia de nichos.

Ventas

Respecto a los concesionarios, ¿cuál es el plan para 2022? ¿ampliar la red o reforzar lo que ya está?

Las dos cosas. New Holland necesita cubrir un poco más de territorio y, por otro lado, reforzar los puntos de venta que ya están consolidados.

Para nosotros, la red de concesionarios es muy importante. Ahí está la clave.

Tener concesionarios fuertes y desarrollar concesionarios, para nosotros es muy relevante.

Hay un trabajo que lleva varios años respecto a profesionalizar la red. Desde el área de desarrollo de red, se viene insistiendo mucho en ese sentido.

¿Cómo se puede calificar al 2021 en términos comerciales?

El año, agrícolamente hablando y respecto a la demanda, es muy bueno.

El tema, un poco, es la coyuntura que tenemos hoy en el país de poder contar con los componentes para armar los tractores y las cosechadoras.

¿Está firme la demanda?

Hoy los productores están demandantes, necesitan la maquinaria. Lo que vendemos son herramientas de trabajo y el agro las necesita para producir.

El mercado está demandante y la cuestión es ayudarlo en la disponibilidad de los productos. En ese aspecto hay ciertas complicaciones porque debemos tractores y cosechadoras a algunos clientes.

Pero somos optimistas y pensamos que, de acá a fin de año, vamos a poder cumplir con varios de nuestros clientes.

Tractores

El avance de sembradoras de gran porte y de otras máquinas de mayor volumen, como tolvas y carros forrajeros, ¿modificó el mercado de tractores en cuanto a potencia?

Así es. Hace unos años, la potencia media de un tractor era de 150 CV y ahora la potencia media se ubica en torno a los 200 CV.

Las sembradoras, por ejemplo, han aumentado el ancho de labor pero también han sumado dosificadores y muchos componentes hidráulicos que requieren mayor potencia del tractor.

¿Se puso competitivo el segmento de tractores de Baja Potencia?

En tractores, en general, tenemos la oferta de productos más completa del mercado argentino, de 30 CV a 700 CV. Tenemos más de 350 configuraciones.

New Holland tiene en tractores de Baja Potencia una oferta diversificada para distintas producciones y eso hace un portfolio enorme de productos.

Entonces, debajo de 100 CV tenemos los tractores especiales, que les decimos, viñateros, fruteros, más específicos y con diferentes configuraciones, según las necesidades de los clientes.

Todo esto hace que el universo debajo de 100 CV sea muy grande.

Cosechadoras

¿Se ha concentrado el mercado argentino de cosechadoras en los modelos más grandes?

Si. El 70% del mercado argentino de cosechadoras se concentra en las clases 6 y 7. Y está repartido en porcentajes similares para cada una, es decir un 35%.

Aunque hay un poco más de tendencia hacia la clase 7, actualmente.

¿Qué tecnología demandan los clientes en cosechadoras?

Lo que el productor y el contratisyta demandan es que la cosechadora tenga una alta productividad.

El productor argentino es muy eficiente, uno de los más eficientes del mundo. Para eso necesita innovación y tecnología.

Nacionalizaciones

Después de la nacionalización de los tractores TT4 ¿habrá más nacionalizaciones?

Si, el plan de la planta industrial de Córdoba siempre es ampliar la oferta de productos.

Este año fue el TT4 y seguirá el T5. Son tractores que van de 90 a 110 CV e incorporan transmisión PowerShift y una caja nueva.

La tecnología de los tractores más grandes va bajando a los tractores más chicos. Ese también va a ser un lanzamiento importante.

Serán novedades en tractores, especialmente, para el sector ganadero, con inversor y con una pala frontal, entre otros recursos.

¿Se verán esas novedades en Expoagro 2022?

Si, haremos el lanzamiento. Mostraremos también el TT4 que no lo pudimos exhibir mucho físicamente en función del tipo de lanzamientos a los que estábamos acostumbrados.

Habrá varias cosas para mostrar en Expoagro.

New Holland continúa apostando a la innovación para estar en todo momento junto a sus clientes.

¿Qué está pasando con el rubro de equipos forrajeros?

Existen complicaciones porque son productos importados.

De todos modos, estamos con rotoenfardadoras de varios tamaños y segadoras de tiro central y lateral, por ejemplo y con un universo de productos enorme.

Nos movemos como podemos, no con el volumen que quisiéramos, pero seguimos estando presentes.

Estrategia

¿Ha cambiado el paradigma en la forma de vender las máquinas agrícolas? ¿ahora hay que adaptar la oferta a las necesidades específicas del cliente?

Por supuesto, totalmente. Nosotros hace mucho que venimos con esa política.

Es decir, consultar a nuestros clientes sobre lo que realmente necesitan.

Por ejemplo, los tractores, más allá de los neumáticos, que sean simple tracción o doble tracción, ¿cómo lo requiere el cliente? ¿con levante o sin levante?

El objetivo es adecuar el producto, porque si un productor no necesita levante, no debe gastar U$S 5.000 más en un recurso que no va a usar.

El mercado argentino se ha transformado en un mercado de nichos para la empresa que quiere crecer.

Entonces, nosotros importamos los tractores articulados de Alta Potencia, de 700 CV, que son productos de nicho. Lo mismo las picadoras de forraje o inversores de andana.

¿Cómo impactan en el negocio?

Productos de relativamente bajo volumen pero si uno quiere crecer y llegar a todos los productores y todas las necesidades, los tiene que tener.

Uno de nuestros objetivos a 3 o 4 años, crecer en el portfolio para tener todas las soluciones para el productor.

Fuente: Maquinac

Jacto muestra en Argentina la fertilizadora Tellus 10000 NPK

Jacto da los primeros pasos para sumar a su oferta en el mercado argentino a la fertilizadora de arrastre Tellus 10000 NPK.

Se trata de un equipo de arrstre, con tolva de 5.000 litros de capacidad y sistema de distribución doble disco con el que alcanza un ancho de cobertura de hasta 50 metros.

En el caso de la aplicación con productos en polvo, propone capacidad máxima en cualquier calibre disponible y un alcance de hasta 12 metros.

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Características

La fertilizadora Tellus 10000 NPK controla la rotación de la cinta dosificadora y la altura de las compuertas, con apertura y cierre automáticos, además de preservar la granulometría de los fertilizantes.

Mediante el sistema SmartSet se puede ajustar el rango de aplicación del equipo en función de la variedad de fertilizantes.

También opera con un mecanismo que controla la aplicación en borde (ubicado en el lado derecho de la máquina) a fin de reducir errores y minimizar la aplicación de fertilizantes en áreas no deseadas. como senderos.

El rango de aplicación se divide en 12 secciones que se abren y cierran automáticamente, reduciendo al mínimo las superposiciones en las entradas y salidas de los bordes.

Esta tecnología cuenta con la licencia de Sulky, empresa con la que Jacto mantiene una alianza estratégica.

Dependiendo del formato de la zona, el ahorro puede llegar hasta el 15% de fertilizantes.

Fuente: Maquinac